Agarro a mi tía en la cocina y me la follo sin descanso

Hace tiempo abrí un restaurante familiar y quise que mi tía se encargase de la cocina. La verdad es que es una profesional y sus platos son una maravilla, pero cada vez que coincido con ella entre los fogones, no puedo evitar fantasear con ella. De hecho un día aparecí por allí y la interrumpí mientras cocinaba, hasta meterle mano y subirla a una de las mesas, echándole un polvazo y penetrando su coño peludo sin parar.