Comida de coño gracias a mi abuelo
El calentón que tenía en medio del campo era muy grande, pero nada comparado al que llevaba mi abuelo encima. Empezó a meterme mano y a tocarme las tetas, hasta que no pude más y le pedí que me metiese una buena comida de coño, donde pude comprobar que mi abuelito sabe como saborear un chochito.
Vídeos de incestos relacionados: