Volví a casa de permiso y fui directa a por mi hijastro

Después de varios meses de maniobras, al fin tuve unos días de permiso y volví a mi casa, donde mi marido y mi hijastro me recibieron por todo lo alto. Yo andaba muy cachonda, ya que llevaba tiempo sin sexo pero cuando fui a la cama, mi esposo se quedó dormido. Así que recurrí a su hijo y me arrastré por el suelo hasta el sofá, chupándole la polla y pidiéndole que calmase mis ganas de follar con un polvete.